Cada día nace una idea en papelillos de mi escritorio, en servilletas con sobras de alimentos mañaneros, en archivos del computador de mi trabajo...
Se moldea una historia de muerte y fascinación por la bestia interna, por ese ser sin escrúpulos que decide salir de vez en cuando y nos ahoga en adrenalina...
Se escribe una historia con sangre de más santos que pecadores, se escribe con dolor, pasión, crueldad e improvisación. Se escribe también con amor, con pasión, lujuria y deseo por el sexo femenino, se escribe en la espalda húmeda de una mujer desconocida en cama ajena.
Ser romántico, sexual, apasionado, odiar el desamor, ahogarse en el cuerpo femenino, amar cada experiencia con una mujer, despreciar el rechazo, amar y odiar por igual, escribir cada sentimiento de amor y odio, hablar de experiencias propias e imaginarias en mis escritos, dejar volar la imaginación del lector con mis letras y tratar de conectar con recuerdos y sentimientos muy propios. Juan Guillermo Gutiérrez Aragón.
LA OSCURIDAD QUE IMPREGNA EL AMOR
LA OSCURIDAD QUE IMPREGNA EL AMOR
Lugar creado para dar espacio a los oscuros escritos que se tatúan como runas espectrales en la piel del dolor, todas las palabras se mojan en lágrimas de lamentos interminables y se escriben prácticamente solas en hojas de papel desgastado y corroído por la realidad que se vive en un mundo lleno de vástagos de las tinieblas, herederos del terror que buscan en la opacidad de la noche, un rincón donde poder dar rienda suelta a sus odios y donde poder conseguir mantener ocultos sus máximos temores y sus más mórbidos sentimientos, logrando encarcelar su indescriptible y casi inalcanzable amor presente.
Este espacio surge para dar luz y color a todo aquello que permaneció oculto por miedo a no ser apreciado, ser amante de la oscuridad y la noche y ver en esas dos damiselas, las cómplices perfectas para escribir, imaginar y recordar todo lo que el corazón desea con fervor.
martes, 14 de octubre de 2014
CUELLO ABIERTO EN NOCHE ESTRELLADA
Lo esperaba tras la espesura del bosque, era evidente que quería encontrarse conmigo desde hacía un buen tiempo,... tan sólo quería hablar conmigo, el muy crédulo solía salir una que otra noche a caminar, a veces sin rumbo fijo, tal y como yo el... sólo caminaba, el sabía que yo estaba por allí, trotando igual que el, sabía que lo odiaba con todas mis fuerzas, sabía que nunca lo perdonaría por lo que me hizo, era tanto o más desafiante de lo que yo era con todos, quería confrontarme... pero no sabía o siquiera imaginaba lo que yo pensaba hacerle.
Mi corazón estaba muy acelerado... más de lo normal, presentía algo, quería devolverme por donde vine, pero la ansiedad y la rabia que inundaba mi ser, me consumían con el pasar de los segundos, miles de ideas se pasaban por mi cabeza, quería arrepentirme, quería dar vuelta atrás,... pero a la vez sentía que no era posible decirle "NO" a la ansiedad que esa noche abrazaba mi corazón.
El cielo estaba completamente gris, escuchaba pasos acelerados, seguidos por una pálida y temerosa voz que decía entre susurros desconfiados... -¡ juan !, juaaaan... !¡... me escuchas?, juaaan-... Era tarde ya, su suerte estaba echada, lo seguía con mi mirada entre la maleza de aquel bosque público, era casi imperceptible entre la oscuridad, miraba atento sus manos, que no tuviera nada con que defenderse, mi corazón se aceleraba cada vez más... casi podrían danzar con aquel "tum tum" dentro de mi pecho, era rápido, desordenado, mis ojos desbordaban locura, ocultaba mi machete de la luz luna, no quería que un tonto reflejo acabara con mi engaño y descubriera vilmente el sigilo que traía.
Salí corriendo y di un salto, aquel hombre estaba aterrado, lo vi en sus ojos... lancé un ataque contundente contra su garganta, se abrió fácil como un fruta podrida, la sangre empezó a manchar su camisa-esqueleto, sus ojos se perdían en el inmenso cielo opaco de aquella noche... mi corazón empezaba a retumbar cada vez menos,... empezaba a calmarme, había logrado mi cometido, afortunadamente nadie sabía de nuestra pequeña riña en la mañana, sólo mi esposa sabía lo que pensaba hacer... y si no guardaba silencio... seguiría ella.
+Degollado en la Noche+
Juan Guillermo Gutiérrez Aragón.
lunes, 6 de octubre de 2014
BOMBA ANAL
Mi esfínter se dilata hasta el punto de parecer un hoyo negro en el espacio vacío del universo, mis ojos se cruzan y dibujan un marcado y jocoso estrabismo en mi rostro, mi colon sostiene una batalla casi imposible de librar, el enema oral parece batallar en las oscuras y viscosas cloacas de mi intestino, es como si realmente no ayudara en nada, mi pared abdominal sigue creando fuerza con el fin de expulsar la primera cantidad de diarrea violadora por mi ano, la fuerza mental es tal que las venas de mi cabeza brotan como erupción alérgica en la epidermis, las venas se hacen gruesas, la cantidad de sangre que circula convierte mi rostro en un tomate maduro y parece estar a punto de explotar igual que cuando aquellos tomates son destripados en la fiesta de La Tomatina de Valencia en España, no puedo más, voy a explotar, maldito estreñimiento, aaahhhhh!!!!!
Enema Oral = Castigo Diarréico
Juan Guillermo Gutiérrez Aragón.
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