LA OSCURIDAD QUE IMPREGNA EL AMOR



LA OSCURIDAD QUE IMPREGNA EL AMOR

Lugar creado para dar espacio a los oscuros escritos que se tatúan como runas espectrales en la piel del dolor, todas las palabras se mojan en lágrimas de lamentos interminables y se escriben prácticamente solas en hojas de papel desgastado y corroído por la realidad que se vive en un mundo lleno de vástagos de las tinieblas, herederos del terror que buscan en la opacidad de la noche, un rincón donde poder dar rienda suelta a sus odios y donde poder conseguir mantener ocultos sus máximos temores y sus más mórbidos sentimientos, logrando encarcelar su indescriptible y casi inalcanzable amor presente. Este espacio surge para dar luz y color a todo aquello que permaneció oculto por miedo a no ser apreciado, ser amante de la oscuridad y la noche y ver en esas dos damiselas, las cómplices perfectas para escribir, imaginar y recordar todo lo que el corazón desea con fervor.



SE MOLDEA UNA HISTORIA

Cada día nace una idea en papelillos de mi escritorio, en servilletas con sobras de alimentos mañaneros, en archivos del computador de mi trabajo... Se moldea una historia de muerte y fascinación por la bestia interna, por ese ser sin escrúpulos que decide salir de vez en cuando y nos ahoga en adrenalina... Se escribe una historia con sangre de más santos que pecadores, se escribe con dolor, pasión, crueldad e improvisación. Se escribe también con amor, con pasión, lujuria y deseo por el sexo femenino, se escribe en la espalda húmeda de una mujer desconocida en cama ajena.


Juan Guillermo Gutiérrez Aragón.


martes, 12 de abril de 2011

Hoy no hay versos...

Hoy no hay versos, sólo palabras que intentan conjugarse y rimar
hoy no hay cielo, sólo un paragüas que no nos deja mojar,
hoy no hay suelo, sólo piedras que nos hacen sentir la realidad
hoy no hay besos, pues mi lengua está seca de cansancio;

   El amanecer me deja ciego, y solo tu luz me ilumina
   las nubes me cubren, y sólo tu luz me muestra el camino

Hoy no hay versos, porque la verdad no será más ocultada
hoy no hay cielo, porque el sol ya no puedo taparlo con un dedo,
hoy no hay suelo, porque la tierra se ha quebrado para tragarme
hoy no hay besos, porque mis labios están cosidos con tonterías.

   La oscuridad no me deja avanzar y ya no hay nadie que me salve
   las heridas se abren con el pasar del tiempo... y solo la muerte parece perdonarme


Juan Guillermo Gutiérrez Aragón.

No hay comentarios:

Publicar un comentario